La forma más limpia de energía es la energía renovable. Para hacer frente a la emergencia climática y mejorar la seguridad energética, la UE tiene como objetivo la transición a una economía altamente eficiente y 100% renovable para 2040. Este enfoque es sostenible tanto económica como ambientalmente. Lograr este objetivo requiere de la transformación de varios sectores, incluyendo los de la energía, la calefacción, la industria y el transporte, con una fuerte voluntad política, apoyo público e inversiones privadas.
La energía renovable es vital para las personas ya que garantiza el acceso a una energía limpia y asequible al tiempo que reduce los riesgos para la salud y el medio ambiente asociados con los combustibles fósiles. Para el planeta, acabar con la dependencia de los combustibles fósiles es crucial para combatir el cambio climático y preservar la habitabilidad de la Tierra. Desde una perspectiva empresarial, la transición energética mejora la competitividad, crea puestos de trabajo e impulsa los beneficios financieros.
La UE ha logrado avances significativos, incluidos objetivos vinculantes para la energía renovable y la eficiencia energética, pero es necesario adoptar nuevas medidas. Abogamos por la eliminación gradual del carbón y el gas fósil, acelerando la electrificación, dando prioridad a la eficiencia energética, empoderando a los ciudadanos en la transición y aumentando las inversiones en energías renovables, tecnologías sostenibles y soluciones de energía verde.
Palabras clave: energía renovable, energía limpia, energía verde, energía baja en carbono, energía eólica, energía solar, energía hidroeléctrica, energía térmica